Vuelta a la normalidad

Como bien dije la semana pasada, estaba pasando un proceso gastrointestinal bastante molesto. Bien, pues esto tuvo su culmen el sábado, un fuerte dolor intestinal me tuvo en cama prácticamente todo el día. Aún no sé a qué se debe, no fui al médico. El viernes tuvimos cena con unos amigos, y el sábado ya me levante revuelto, y según desayuné me vinieron los dolores. Como ya digo, me tuvo en la cama todo el día. Así que este fin de semana no he corrido. Quería haber pasado de los 50 km esta semana, pero no ha podido ser. La verdad es que el domingo iba a haber salido por la tarde, pero lo pensé bien y preferí recuperarme para estar a tope ya el lunes.
Hoy me he levantado bien. Creo que mi intestino se va regularizando. Después de 10 días parece que esto vuelve a la normalidad, veremos mañana qué tal. Por la mañana he hablado con Rober a ver qué hacíamos hoy. Hemos quedado a las 19:00h. para hacer unos 10 km. a un ritmo "alegre" le he propuesto. Otro día gélido, el sol daba un poco de tregua, pero a las 7 de la tarde poco sol quedaba, y el viento ya cortaba. Orejeras, braga y 3 camisetas, toma ya. Realizamos los 2 km. de calentamiento de rigor hasta el parque, estiramos y nos ponemos al tema. Hablamos de hacer la tirada a 4:20-4:30. Rober tira delante. Rodeamos el Hospital de Alcorcón, rodeamos también la zona comercial del Parque Oeste. Yo voy pensando en mi zancada. Experimento. Para eso están los entrenamientos. Pruebo a hacerla aún más corta y rápida, a tocar el talón lo menos posible con el suelo... Me queda por aprender todavía. Llegamos al parque para dar dos últimas vueltas, está a tope de corredores. La verdad es que si hay tanta gente ahora, no me quiero imaginar cómo estará cuando llegue el buen tiempo. Terminamos la tirada con 8,5 km en 37 min. con pocos segundos, a 4:23. Estiramos bien, y otros dos km. de enfriamiento para casa. En total, hoy unos 12 km. Hoy me he sentido cómodo, pero también con falta de chispa todavía por lo del sábado. Fue un día casi en ayunas.
Esta semana no podré entrenar por la mañana. Salgo del trabajo a las 16:00h., recojo a la niña de la guarde y hasta las 18:30 que llega la mamá del trabajo (a esa hora ya me puedo escapar). Siempre respetando los tiempos para la familia, es lo más importante para mi.